Monday, February 11, 2019

Cómo una dieta cavernícola ayudó a una mujer a manejar la prediabetes y el SOP

Tara Grant, ahora de 44 años, tenía sobrepeso y sufría de síndrome del intestino irritable (SII), acné quístico, hidradenitis supurativa (una rara enfermedad autoinmune que causa bultos pequeños y dolorosos debajo de la piel), artritis, tendinitis, baja El deseo sexual y la depresión. Luchó por encontrar una causa para estos diversos síntomas, consultando a unos 40 médicos en total durante 15 años. Finalmente, le diagnosticaron síndrome de ovario poliquístico (SOP) y prediabetes.

El SOP es un trastorno hormonal que afecta a aproximadamente 1 de cada 10 mujeres en edad fértil en los Estados Unidos, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. Esta afección puede provocar infertilidad, resistencia a la insulina y diabetes tipo 2, y se cree que es un factor de riesgo para la enfermedad cardíaca, según Adrienne Youdim, MD, especialista en nutrición médica en Beverly Hills, California, y profesora asociada de medicina. en la Escuela de Medicina David Geffen en UCLA. El SOP causa síntomas como periodos irregulares, crecimiento excesivo de vello, acné y obesidad.

Si bien no hay cura para el SOP, las píldoras anticonceptivas a menudo se recetan para regular los períodos, y la metformina se prescribe para controlar los niveles de glucosa en la sangre. "Lo bueno, sin embargo, es que el cambio de estilo de vida, la dieta y el ejercicio, es el tratamiento para el SOP", dice el Dr. Youdim. De hecho, los estudios muestran que tan solo un 10 por ciento de pérdida de peso puede ayudar a restablecer la ovulación y mejorar los síntomas. "Y, por supuesto, cuanto más pérdida de peso, mejor", dice ella.

Sin embargo, perder ese peso es más fácil decirlo que hacerlo, especialmente porque los cambios hormonales provocados por el SOP pueden hacer que perder peso sea más difícil que para una persona promedio. Grant, un escritor y consejero de orientación espiritual que vive en la isla de Vancouver, Canadá, se sintió motivado. Pero los consejos que recibió de sus proveedores de atención médica en ese momento, simplemente reducen su ingesta de calorías y grasas, no estaban funcionando para ella. Fue solo cuando comenzó una dieta que trataba su resistencia a la insulina, cree, que las cosas empezaron a cambiar para mejor.

Éxito en la pérdida de peso, resistencia a la insulina y PCOS
Aunque la investigación muestra que existe una asociación entre el PCOS y la diabetes tipo 2, y la resistencia a la insulina juega un papel importante, el vínculo entre los dos, y que ocurre primero, sigue sin estar claro. Las mujeres que tienen PCOS luchan con el peso debido a la resistencia a la insulina y los niveles de testosterona más altos de lo normal.

La insulina es una hormona que ayuda a su cuerpo a convertir la glucosa (el producto de la digestión de carbohidratos) que consume de los alimentos en energía, al regular la absorción de glucosa de las células. Cuando las células de los músculos, la grasa y el hígado no responden bien a la insulina, no pueden convertir la glucosa en energía con la misma eficacia. Esto se llama resistencia a la insulina. El exceso de glucosa se acumula en forma de grasa.

El peso adicional aumenta el riesgo de resistencia a la insulina en cualquier persona, pero las mujeres con SOP parecen tener un defecto en su receptor de insulina, que es responsable de controlar cómo las células usan la glucosa, según Youdim. "Además, el nivel más alto de insulina afecta aún más la producción de hormonas masculinas al estimular directamente las células productoras de andrógenos en el ovario", dice ella.

No solo las mujeres con SOP tienden a cargar peso en su sección media, al igual que los hombres, también son más propensas a tener grasa visceral, la grasa abdominal que rodea los órganos. Esta grasa visceral es más dañina porque libera citoquinas o sustancias químicas que conducen a la inflamación, promueven los factores de coagulación de la sangre y estimulan las hormonas que conducen a la resistencia a la insulina, la presión arterial alta y los problemas de salud cardiovascular, dice Youdim.

Cómo podrían ayudar el corte de carbohidratos y la adición de proteínas
A pesar de registrar todo lo que comía y hacer ejercicio seis días a la semana durante dos horas al día, Grant no podía hacer el cambio de escala. Decidió reducir los carbohidratos, lo que la ayudó a perder 40 libras y alivió sus síntomas. Pero una vez que comenzó a comer granos nuevamente en un "día de trampa", sus síntomas regresaron. Y en 2008, después de someterse a la fertilización in vitro (FIV) y dar a luz a mellizos, Grant se encontró 80 libras más pesada y seguía ganando. Ella dejó de pesarse, pero estaba segura de que pesaba más de 300 libras y estaba asustada.

Desesperado por una solución, Grant leyó The Primal Blueprint de Mark Sisson y decidió intentarlo. El libro detalla un plan de dieta basado en paleo, y la teoría de Sisson es que la nutrición es 80 por ciento de la pérdida de peso. Promueve la idea de que comer menos azúcar y más grasa puede revertir la resistencia a la insulina, y que trabajar de manera más inteligente, no más difícil, es el camino a seguir. El enfoque de Sisson es la epigenética, el estudio de cómo las cosas como la dieta, el estilo de vida y el estrés pueden "activar" y "desactivar" los genes, independientemente del código genético o la predisposición de una persona para una determinada condición de salud. Comer los alimentos correctos y darle al cuerpo los nutrientes que necesita puede ayudar a reparar el daño a nuestro ADN.

Otorgue inmediatamente los alimentos procesados ​​y todas las fuentes de azúcar, granos y agua.


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